Arquitecto de profesión, la propia carrera con su componente humanístico le abrió otros horizontes que desarrolló con intensidad y gran dedicación en la segunda parte de su ejecutoria personal “sin levantar cabeza”. Amante del trabajo que le gusta y le permite ser prolífico en él, se entrega sin limitaciones, pensando siempre en ser constructivo y creativo. Su larga trayectoria puramente profesional (1950-1970) la llevó a cabo en el período histórico del desarrollismo, diseñando y ejecutando un considerable número de edificios de viviendas, oficinas, industriales y de enseñanza. Tuvo magníficos maestros en la Escuela de Madrid desde Luis Moya a Fernando Chueca, pasando por Torres Balbás y López Otero, y en su época de estudiante se formó junto con futuros grandes arquitectos como Fisac, Cano Lasso, Sáenz de Oiza, Molezún, de la Sota, creadores de un movimiento arquitectónico hoy altamente valorado.
Simultáneamente a la Arquitectura, también ejerció el Urbanismo profesional realizando planes de ordenación de diversas ciudades y zonas urbanas conflictivas, como la Huerta de Murcia o la Costa del Sol. A partir de 1970 entró en la Administración, donde desempeñó los cargos de Subdirector General de Ordenación Urbana y Director Técnico de COPLACO (Área Metropolitana de Madrid). En 1980 entró en la Junta de Gobierno del Colegio de Arquitectos de Madrid y fue presidente de su Comisión de Urbanismo.
Desde 1980 cesó en su actividad profesional, para centrarse en el estudio e investigación del Arte y la Historia. Destacan en ella estas dos líneas de investigación: “El Concejo de Langreo en los siglos XVI, XVII y XVIII” y “La Arquitectura Románica Española de la Peregrinación y la Orden de Cluny”. Asimismo ha realizado estudios detallados de “Pintura gótica catalana de los siglos XIV y XV” y “Pintura Castellana del siglo XVI”. En el año 2000 entró como Académico de Número en la Real de Doctores, y en 2004 como Correspondiente en la de la Historia, y en una y otra ha publicado cantidad de trabajos de investigación, dictado múltiples conferencias, y promovido ciclos de conferencias sobre “La Cultura Española en la Historia” en la de Doctores. Escritor infatigable de libros de temática variada, pero siempre relacionados con hechos rigurosamente históricos, son de señalar: “Los Hidalgos langreanos” (1995), “Marcelino González García, vida y triunfo de un asturiano en La Habana” (1998), “La Epopeya de la Piedra” (2003), “De pura cepa langreana” (2004), “El Ocaso de los Hidalgos” (2008) y “Los Gómez de Arandedo” (2013).